J. Ratzinger: El académico

Hablar de Ratzinger ha cobrado un peso específico en los albores del siglo XXI, ya que, mucho ha escrito y mucho se ha escrito sobre él. Su reciente dimisión al Pontificado de la Iglesia Católica que asumió en abril de 2005, generó muchas reacciones y muchas más opiniones, pero Joseph Ratzinger, no solo es Benedicto XVI; aquí un breve acercamiento al Ratzinger académico, esto es, al teólogo y filósofo de la Universidad de Freising, de Munich y de Friburgo; aquel cuyas influencias en el ámbito filosófico después del neo-kantismo están cerca de las obras de Gertrud von le Fort, Ernst Wiechert, Elisabeth Langgässer, Theodor Steinbüchel, Martin Heidegger, Karl Jaspers, Fiódor Dostoyevski, San Agustín y San Buenaventura.

Un momento de gran trascendencia en la comunidad académica de este siglo fue el realizado el día 19 de enero del 2004 en la Academia Católica de Baviera en Munich entre Jürgen Habermas y Joseph Ratzinger bajo el tema, Entre razón y religión: Dialéctica de la secularización.

Aquella reunión académica marcó una nueva relación entre la tradición judeo-cristiana y la ilustrado–racional; entre la razón y la fe; entre en- tender y creer. Esta nueva relación consiste en la restauración de un diálogo que, o bien nunca se tuvo, o se abandonó en el seno de las ideologías.

Resulta difícil decir en pocas palabras lo que abarca este encuentro, por ello, basta –por el momento– con la pregunta: ¿Es posible construir la democracia en el marco de las sociedades plurales donde creer puede ya no tener significado?

“…un orden constitucional totalmente positivado necesita todavía de la religión o de algún otro poder sustentador para asegurar cognitivamente los fundamentos que lo legitiman” (Habermas, 2008); o si ¿Es la religión una fuerza de curación y de salvación? ¿O no será más bien, un poder arcaico y peligroso que construye falsos universalismos induciendo a la intolerancia y al terror? (Ratzinger, 2008).

La herencia que nos deja este encuentro son precisamente las sociedades postseculares; aquellas en donde el diálogo se torna centro y posibilitador de nuevas formas de convivencia humana. Formas que dan cabida a las sociedades plurales, que ya han abandonado los viejos paradigmas ideológicos sustentados en el deber por el deber y que solo exacerbaron la moral –personal o de grupo– la positivaron y se impusieron como formas de control que resultaron ser aparentes y polarizadas formas de convivencia humana.

Es por esta altura académica que se extrañan las mentes cuando deciden ir a vivir al claustro y quedar arropados por el silencio y la contemplación. Cuando se reconocen a sí mismas frágiles y con un profundo anhelo de “estar en paz” después de haber dado tanto. Cuando se ofrecen como encarnación de la banalidad que significa hoy en día el poder. Cuando el otro es primacía en la interpelación.

Por ello, gracias Joseph Ratzinger; nos dejas mucha tarea, nos dejas mucho que leer. Nos dejas el siglo XXI para perderle el miedo a la fe y a la razón.

· Rafael De Gasperín es Director de la Cátedra Institucional en Sistemas de Creencias y Globalización del Tecnológico de Monterrey, así como profesor del departamento de Filosofía y Ética del Campus Monterrey. Director y editor de la Colección Tecnológico de Monterrey. Actualmente se encuentra realizando una estancia académica en el CISAV.

Referencias:

Habermas, J. (2008). Fundamentos prepolíticos del estado democrático de derecho. México: Fondo de Cultura Económica.

Ratzinger, J. (2008). Lo que cohesiona al mundo. Los fundamentos morales y prepolíticos del estado liberal. México: Fondo de Cultura Económica.

* Artículo publicado en Revista Integratec, editada por el Tecnológico de Monterrey. La versión digital la encuentras en: http://ow.ly/meVtW