Libertad de expresión sin restricciones

La libertad es un principio garantizado desde los tratados internacionales, por lo que debe ser respetada. No debe ser motivo de exclusión la preferencia por la profesión de cualquier religión, ni la expresión que trasladada a la vida cotidiana; es dar cabida a decir lo que se piensa “en el escenario público”, sin un daño a terceros.