El Director del Centro de Investigación Social Avanzada, Rodrigo Guerra López fue invitado de honor de la X Jornada Nacional de Bioética organizada por el Centro de Bioética «Juan Pablo II” en La Habana, Cuba.
Este Centro está dirigido por el Dr. René Zamora, el Dr. Jorge Suardíaz y el Dr. Domingo Pérez.
La inauguración tuvo lugar en la Basílica de San Francisco de Asís en el Centro histórico de La Habana. Asistieron aproximadamente 500 personas, principalmente médicos provenientes de toda la Isla. En primera fila estuvo una representación del gobierno cubano, de la Academia de Ciencias y el Card. Jaime Ortega, Arzobispo de La Habana.
Así mismo, Rodrigo Guerra presentó la conferencia magistral “Fundamentar la bioética: importancia de las relaciones entre ética y ciencias biomédicas para la constitución de la bioética”. El Dr. Guerra procuró demostrar la importancia de la ética como factor de unidad sapiencial de la bioética como ciencia. La bioética se construye metodológicamente a través de un esfuerzo interdisciplinario en el que concurren saberes de distinta índole: biología, psiquiatría, sociología, antropología cultural,medicina, biotecnología, ect.
Sin embargo, la interdisciplinariedad de la bioética exige criterios arquitectónicos para constituirse y desarrollarse. Estos criterios arquitectónicos son los que provee la antropología filosófica, es decir, la teoría que reconoce la estructura del ser humano como persona y que demanda a las múltiples disciplinas un cierto orden, un cierto sistema, en su interacción y elaboración. La interrelación entre las diversas disciplinas debe estar guiada por el fin de defender a la persona humana.
Una bioética intrínsecamente ética, metodológicamente interdisciplinar y antropológicamente articulada puede proponerse como una bioética sin adjetivos. Es decir, una bioética que por su rigor científico puede desligarse de toda etiqueta. El calificar a la bioética como liberal o conservadora, como católica o laica, como utilitarista o aún personalista, habla de compromisos de escuela antes que de rigor científico. Para el Dr. Guerra hablar de una bioética con adjetivos es tan impropio como hablar de una “fisiología liberal” o de una “matemática laica”. La bioética si quiere tener algún futuro debe preocuparse más por su cientificidad y rigor racional.
Así mismo, en el Contexto de este Congreso, se hizo una visita general al Centro de Bioética «Juan Pablo II» donde se dio un intercambio de materiales (libros y revistas) entre el Dr. Guerra y los Dres. Kayhan Parsi y Aaron Michelfelder de la Loyola University de Chicago.